Ahora que es más fácil pedir comida, a veces apetece ser perezoso y no cocinar. Eliges algo sabroso en Internet y esperas al repartidor. Y si tu alma desea una pequeña celebración, entonces puedes ponerte bonito e ir a un restaurante o cafetería. El único problema es que los platillos que nos terminan sirviendo no siempre están a la altura de nuestras expectativas.
in Spanish
GIPHY App Key not set. Please check settings